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En una jornada organizada por el Frente Barrial de la CTA Provincia de Buenos Aires, se multiplican las ollas populares.

Hoy jueves 6, el Frente Barrial de la CTA Provincia de Buenos Aires instaló más de mil ollas populares, en una jornada que busca llamar la atención de las autoridades nacionales y provinciales sobre el inaceptable nivel de pobreza que se padece en Argentina.

“El hambre no puede esperar hasta octubre”, fue la consigna que movilizó ayer al Frente Barrial de la CTA Provincia de Buenos Aires para hacer el anuncio de la jornada que se vive hoy. Lo hizo, mate cocido por medio, ante el Obelisco de la ciudad de Buenos Aires, donde se denunció la situación “de la población producto de las políticas de ajuste que sostienen los gobiernos de Macri y de Vidal”.

Ahí los referentes de las organizaciones sociales que integran el Frente, Paciano Ocampo, Juan Vitta y Mario Micheli coincidieron a la hora de señalar que estas actividades son la continuidad de la masiva movilización llevada a cabo no hace mucho hacia la sede del Ministerio de Desarrollo Social de la Nación.

En este sentido, desde la Conat y el MTL, Micheli recalcó que todavía la cartera que preside Carolina Stanley no dio “ninguna respuesta a la grave situación de hambre que crece cada día”.

El frente fue claro cuando por medio de un comunicado, hizo hincapié en que “ante el crecimiento del hambre, la indigencia y la pobreza; la pérdida permanente de puestos de trabajo, la falta de changas en los barrios; el deterioro de la Salud y la Educación Pública, la imposibilidad de acceder a los servicios públicos por los tarifazos, etc., se pretende alertar de la situación que se padece y llamar la atención acerca del hambre que debe ser para todos el primero y más urgente de los problemas de nuestro país”.

 

Terrible situación

 

También participaron el titular de la CTA de la Ciudad de Buenos Aires, Eduardo López, y el secretario general de la CTA bonaerense, Roberto Baradel, quien recordó que “tenemos relevados la falta de más de cuatrocientos mil cupos en comedores escolares y comunitarios, que no tienen respuestas del gobierno”.

Y, destacó, esto “profundiza la crisis social que se está viviendo y es por eso que el Frente Barrial llevará adelante esta jornada de lucha con la instalación de miles de ollas populares en todo el territorio provincial y nacional”.

Por su parte, el secretario Adjunto de CTA bonaerense, Raúl Calamante, dijo que las ollas populares indican “el descontento de la clase trabajadora ante el constante deterioro de la calidad de vida que venimos sufriendo como consecuencia de las políticas de ajuste y de recorte de derechos planteadas por el gobierno de Macri y de Vidal”.

Casi coincidiendo con la jornada convocada por el Frente, se conoció el último informe del Barómetro de Deuda Social de la Infancia de la Universidad Católica Argentina, que da cuenta de que la pobreza infantil trepó al  51,7 por ciento, al tiempo que la reducción de dieta o hambre por motivos económicos -esto es la inseguridad alimentaria total- pasó del 21,7 al 29,3 por ciento.

Estos datos fueron tomados en base a relevamientos correspondientes a 2018, revelan un aumento del 7,7 por ciento, cifra que se ya se incrementó considerablemente a la luz de los datos inflacionarios del semestre inicial de este año.

Para graficar lo terrible de la situación el informe “Infancias. Progresos y retrocesos en clave de desigualdad” de la UCA asevera que “de 2017 a 2018, casi 900 mil chicos más tienen déficit de al menos un nutriente”. Lo que advierte que casi el quince por ciento de los pibes de dos a 17 años, no puede comer cuatro veces al día. Esto es, 1,6 millones de niños.

Mientras se multiplicaban las ollas y el reclamo, la ministra Stanley sigue en clave electoral y, hoy mismo, llevó a cabo una recorrida por el partido bonaerense de Esteban Echeverría acompañada por su par bonaerense, Santiago López Medrano. Ahí, sin sonrojarse, resaltó que “ahora hay un Estado presente y sin intermediarios”.