El dirigente del PC y el MTL, Gustavo Muñoz, se refirió a la difícil situación económico-social que se vive en el conurbano bonaerense tras conocerse el informe de la UCA que revela que más del 40 por ciento de la población se encuentra por debajo de la línea de la pobreza.
“El índice de pobreza que difundió ayer la UCA confirma lo que vemos todos los días en los barrios populares”, dijo Gustavo Muñoz, dirigente del Partido Comunista de Moreno y referente del MTL, tras conocerse el informe del Observatorio de la Deuda Social de la Universidad católica. Según el documento, Macri terminará su mandato con más de 5 millones de nuevos pobres.
Días atrás, un estudio realizado para la Defensoría del Pueblo de la Provincia de Buenos Aires daba cuenta de la crítica situación sociales que se vive en el conurbano. Según el estudio, cada vez más personas piden comida (y que hasta hace unos años eran clase media), los comedores se llenaron de adultos mayores y patologías que estaban erradicadas hoy son un problema sanitario de primer orden como el sarampión.
Al respecto, Muñoz afirmó que “la situación es muy delicada no solo en el conurbano bonaerense, también lo es en los grandes centros urbanos como Rosario, Santa Fe, Córdoba, Entre Ríos y Tucumán” y agregó que “esto tiene que ver con el gobierno antipopular que el 10 de diciembre se termina”.
En efecto, analizó que “la pobreza es consecuencia de las políticas de ajuste dirigidas desde la Embajada de Estados Unidos y por el Fondo Monetario Internacional” y puntualizó que “el gobierno de Macri fue un gobierno para pocos, en donde los mismos de siempre se enriquecieron y la mayoría del pueblo cayó por debajo de la línea de pobreza”.
Para el dirigente comunista este escenario es intolerable en Argentina porque “somos un país que produce alimentos para cuatrocientos millones de personas pero que no puede alimentar a cuarenta”.
Ante esta situación, recalcó que “hoy los movimientos sociales nos sentimos desbordados, estamos haciendo esfuerzos muy grandes para poder contener a una gran parte de la sociedad que se quedó afuera de todo por las políticas del gobierno”.
Sin embargo, aclaró que “los movimientos sociales, además de contener a las personas, cumplimos una función organizativa muy importante en el territorio. Parte de nuestro trabajo es darle una expresión organizativa a las demandas que emergen y que hoy son básicas: comida y trabajo”.
Por ello, “tenemos la obligación de profundizar la organización y la lucha de los sectores populares contra la derecha fascista que se está expresando en América Latina y que en nuestro país a partir de lo que quede del gobierno de Macri va a intentar reagruparse”.
En ese sentido y de cara a lo que viene, enfatizó que “el 10 de diciembre tenemos que copar la plaza, el 10 tenemos la posibilidad de empezar de nuevo con un gobierno popular del cual vamos a ser parte para darle una dirección desde nuestra visión política”.
Por último, advirtió que “en Argentina hoy no hay margen para pensar en otra cosa que no sea en solucionar las demandas más urgentes de nuestro pueblo”. En ese sentido, Muñoz fue claro al afirmar que “lo primero que hay que pagar es la deuda interna, recuperar derechos y conquistar nuevos”.