Los maestros rechazan la recomposición salarial que ofrece el ejecutivo provincial. Sigue el plan de lucha decidido por la Asociación Gremial del Magisterio.
En el contexto del plan de lucha con el que comenzó el ciclo lectivo la Asociación Gremial del Magisterio (Agmer), instaló una carpa frente a la Casa de Gobierno de Entre Ríos para rechazar la oferta del ejecutivo que plantea una recomposición salarial real del quince por ciento.
Junto a la decisión de emplazar la Carpa, Agmer decidió continuar con el trabajo docente con modalidad virtual, así como llevar a cabo un paro durante el lunes, martes y miércoles de la semana pasada, para cuando el gobierno preveía la vuelta a la presencialidad. La medida de fuerza va a seguir mañana lunes y si no hay respuestas favorables, durante los días 11 y 12.
Así las cosas, la semana pasada Agmer llevó a cabo un acto frente a la sede del ejecutivo provincial, en el que se hizo hincapié en “el rechazo de la docencia a la política salarial del gobierno provincial”, pero también en que se va a sostener la medida de fuerza a la que se sumaron UDA y Ater.
Vale recordar que ya durante febrero, Agmer realizó un paro con el que advirtió, entre otras cosas, que no estaban dadas las condiciones de bioseguridad y salubridad laboral, para volver a la presencialidad.
Y reafirmó lo que había resuelto en el congreso que hizo durante diciembre de 2020, cuando alertó que no se iba comenzar el ciclo lectivo si el gobierno no satisface la solicitud de recomponer el salario en un rango no menor al 36 por ciento que fue lo que perdió durante el año pasado.
Ahí también estableció que es preciso que el salario inicial se equipare con la Canasta Básica Total cuyo monto fija el Indec y que todo aumento salarial sea remunerativo.
En este contexto, se reunió la Comisión Negociadora de la Paritaria de Condiciones Laborales en la que Agmer estuvo representada por su secretaria Adjunta, Ana Delaloye, y los paritarios Leandro Pozzi, Fabián Peccín, Verónika Veik y Susana Cognom junto a la asesora legal Verónica Fischbach.
Agmer planteó que es preciso que el ejecutivo provincial garantice los mecanismos necesarios “para preservar la salud de los docentes encuadrados como grupos de riesgo y su grupo familiar”, así como el transporte de los docentes hasta su lugar de trabajo en contexto de excepcionalidad que impone la pandemia, entre otras cosas.