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Mar, Abr
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Política
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El bloque de senadores del Frente de Todos presentó un proyecto para incorporar a más de setecientas mil personas al sistema previsional. Mario Alderete, de la Conat, celebró la iniciativa pero remarcó que aún falta un abordaje integral de la política previsional que apunte a la recuperación del poder adquisitivo.

En el marco de la crisis económica que atraviesa el país, y de las difíciles diagnósticos en torno al futuro de la economía nacional, apremiada por las condiciones impuestas por el Fondo Monetario en la renegociación de la deuda macrista, el bloque de senadores del Frente de Todos presentó un proyecto de ley para “la inclusión jubilatoria”. La iniciativa, que en sus aspectos técnicos fue consultada con la Anses, tiene como objetivo que 742 mil personas que no alcanzaron a cumplir los años de aportes puedan jubilarse este mismo año.

Al respecto Mario Alderete, coordinador nacional de la Conat y dirigente del Movimiento Jubilados de Liberación (MJL), dijo que “la iniciativa es para celebrarla, pero hay que remarcar que todavía falta un abordaje integral de la política previsional que apunte a la recuperación del poder adquisitivo de las jubilaciones y pensiones, en el marco de una política de recomposición salarial de todo la economía”.

En el caso de las jubilaciones y las pensiones, Alderete sostuvo que “es muy fácil desmentir el argumento que, por falta de convicción política o por intereses, señalan que no hay dinero para aplicar un aumento general”. En ese sentido, recordó que “existe el fondo de garantía de sustentabilidad, una caja a la que aportan las patronales, el Estado y los trabajadores” pero que muchas veces es usada por el Estado para otros fines y no para sostener el poder adquisitivo de los jubilados y pensionados.

Así como el poder adquisitivo de las jubilaciones, la falta de requisitos formales para acceder a una jubilación es uno de los grandes problemas actuales en materia previsional. El dirigente de la Conat remarcó que “tiene que ser una política de Estado garantizar el ingreso jubilatorio de miles de trabajadores y trabajadoras que trabajaron toda su vida y que en edad de jubilarse, formalmente no pueden hacerlo por lo extendido que está desde hace largos años el trabajo no registrado”. E insistió: “ambos reclamos, el salarial y el inclusivo, deberían ser atendidos inmediatamente apelando a los fondos genuinos del fondo de garantía de sustentabilidad”.

Por otro lado, Alderete dijo que el acceso a la jubilación tiene como objetivo también ampliar la inclusión laboral de las franjas juveniles de la población, ya que cada trabajador que se jubila libera una plaza que debe ser ocupada por una persona joven que pasará a aportar a lo largo de toda su vida, manteniendo el ciclo de recaudación previsional. No obstante, el dirigente hizo hincapié en que "lo cierto es que por la falta de controles por parte del Estado y por el afán de lucro de las empresas privadas, hace largo tiempo que se está ampliando un modelo de precarización del trabajo, mediante el cual se emplean a las personas por fuera de los convenios colectivos de trabajo y, por ende, se erosiona la masa total de aportes jubilatorios".

Asimismo, aseveró que “los grandes poseedores de riqueza se negaron a hacer un aporte por única vez y, obviamente, se niegan a hacerlo periódicamente”. Frente a esta situación, “nosotros señalamos que las políticas de inclusión económica y social, entre las que tienen un lugar destacado las políticas previsionales, deben ser financiadas con los recursos de las grandes fortunas, construidas a costa del salario y la comida del pueblo”. Por eso, “impulsamos la sanción de una ley para que el aporte de las grandes fortunas, que fue por única vez, quede establecido de forma permanente”.

Por último, remarcó que “el sistema previsional argentino, cumpliendo todas sus normas y cláusulas, es de avanzada a nivel mundial”. Este es producto de largas décadas de lucha del pueblo y “es una de las grandes conquistas de la clase trabajadora”. De ahí que uno de los objetivos permanentes de la derecha sea destruirlo. Sin embargo, remarcó que "es de avanzado en tanto se respete cada una de sus pautas, pero deja de serlo cuando comienza a ser erosionado parcialmente, cuando se desconocen algunos de sus puntos más importantes y, por ende, se lo flexibiliza de hecho".