Así lo aseveró Leandro Pozzi quien integra la Lista Celeste Violeta de cara a las elecciones que el 7 de septiembre va a celebrar la central.
El próximo miércoles los trabajadores de la educación afiliados a Ctera elegirán a los miembros de la Junta Ejecutiva, en comicios para los que se oficializaron tres listas: la Celeste Violeta que encabezan a Sonia Alesso y Roberto Baradel, la Multicolor que propone a Angélica Lagunas y Romina Del Pla, y la Azul y Blanca que presenta a Carlos Magno y Marta Gómez.
Leandro Pozzi es secretario de Condiciones Laborales de la Asociación Gremial del Magisterio de Entre Ríos y candidato a la Junta de Disciplina por la Celeste Violeta y aseveró que “para las elecciones ratificamos el proceso de unidad de la Celeste Violeta, reafirmando un programa que tiene que ver con la exigencia de la inversión en educación, sostenimiento de los programas nacionales, las paritarias libres y sin techos, y todo lo que tiene que ver con financiamiento en infraestructura”.
Asimismo, Pozzi añadió que todo esto también representa la “reafirmación de la Ctera con respecto al movimiento pedagógico latinoamericano, como propuesta de los trabajadores de la educación en un horizonte emancipador” y manifestó que “necesitamos una Ctera unida, movilizada” y que de estos comicios la central docente va a salir fortalecida.
Y recordó que la Celeste Violeta “es una lista representativa de todas las jurisdicciones, es federal y resumen el compromiso histórico de nuestra organización en la defensa de la escuela pública, de los derechos laborales docentes y en el derecho social a la educación”.
También destacó que “va a ser muy importante esta mirada sobre el estratégico fortalecimiento de la Ctera como articuladora al interior del movimiento obrero, tanto de la CTA como con otras expresiones sindicales que pongan un programa de liberación nacional y social, en este contexto donde hay recomposiciones progresistas en el orden latinoamericano que deberían tener un correlato en nuestro país, donde los factores de poder mediático, económico y judicial imponen una agenda que debería tener a los trabajadores organizados con una propuesta política que los enfrente y trace un horizonte diferente para Argentina”.