Perotti, Schiaretti y Bordet se reunieron para reclamar medidas favorables al sector agroexportador y avanzaron en la profundización de un programa político para la región centro, una de las más ricas en recursos de Argentina. Desde el PC señalaron el parecido de estas iniciativas con las desarrolladas por la derecha boliviana en la medialuna de aquel país.
“El proyecto político de la región centro que encabezan Perotti, Schiaretti y Bordet tiene aspiraciones que pueden llegar a ser secesionistas” fustigó fuertemente Norberto Champa Galiotti, secretario del PC rosarino, luego de que los gobernadores de Santa Fe, Córdoba y Entre Ríos reclamaran conjuntamente por “dólar soja” especial para los exportadores, a la vez que se pronunciaron a favor de una rebaja impositiva para la producción agroindustrial.
La reunión entre los mandatarios tuvo como punto sobresaliente de su agenda la búsqueda de alternativas para solicitarle al poder ejecutivo nacional una quita de retenciones al “campo” y un precio más “competitivo” para acceder al dólar por parte de los grandes exportadores. En verdad “el dólar soja es un eufemismo, en verdad lo que están pidiendo es que el Estado subsidie y asuma los costos de la sequía”. Galiotti calificó de impertinente el pedido, ya que “si hay un sector que puede soportar una mala cosecha, ese sector es el agroexportador”. En cambio, los dólares que se pierden por las condiciones climáticas generarán problemas en el resto de la economía, siendo un problema real para los trabajadores y para la industria que depende de las importaciones. Frente a esta situación, “los sojeros están pidiendo que el Estado asista a los sectores más fuertes de la economía”.
En suma, Galiotti consideró que “se reunieron para aglutinar las demandas y satisfacer los pedidos de las patronales agrarias y de los grandes exportadores”. Para el dirigente del PC “el pedido no es una novedad, hace rato que los tres vienen trabajando como referentes de la región centro, tratando de dirigir el proyecto político-económico de una de las regiones con más recursos del país, que desde hace varias elecciones viene votando a nivel nacional sistemáticamente a la derecha”.
Más ampliamente, afirmó que “estas reuniones responden a un plan político pensado para estructurar un programa de gobierno basado en el poder económico de la región” y llamó la atención sobre las consecuencias secesionistas de estas articulaciones, teniendo en cuenta los antecedentes en la medialuna de Bolivia y el rol de los gobernadores de esta región en el golpe contra Evo Morales. “Hay un proyecto de la región centro, es un proyecto que incluso puede asumir algunas características secesionistas similar al de la medialuna boliviana” insistió el dirigente.
Para Galiotti, esta política se inscribe en la herencia neoliberal que aún impera en el país. Recordó que “así como en la década del noventa Domingo Cavallo hacía referencia a las provincias inviables, estos gobernadores actúan en nombre de los sectores que son dueños de la riqueza económica de la región y que consideran que no debe ser distribuida” y recalcó que “quieren un país chiquito con un montón de gente afuera”.
Ahora bien, “este modelo sintoniza muy bien con los intereses del imperialismo yanqui en la región”. De acuerdo al análisis del dirigente, “Bordet, Schiaretti y Perotti responden a la necesidad de EE.UU. de afianzarse en su patio trasero, en el contexto de una guerra mundial con epicentro en Ucrania y que tiene un alto impacto en la economía global”. Por lo tanto, repuso, “la forma que tiene EE.UU. de sostener las acciones militares y de enfrentar la crisis global es sometiendo a su patio trasero”.