Fue en La Plata y se debatió la forma de construir un camino “en unidad hacia la gran movilización del 17 de agosto”.
“Debemos construir una movilización fuerte para exigir que se frene a los especuladores, remarcadores y golpistas en lugar de evitar enfrentarlos buscando una conciliación que es imposible”, destacó desde la CTA de La Plata, César Zubelet, al evaluar el resultado del “Primer Plenario Regional de la Central de los Trabajadores en unidad hacia la gran movilización del 17 de agosto”, que se llevó a cabo la semana pasada en la capital de la provincia de Buenos Aires.
La convocatoria estuvo a cargo de la CTA Región Capital que incluye a los municipios de La Plata, Berisso, Ensenada, Magdalena y Punta Indio, a los que se sumaron Chascomús y Dolores. Estuvo presidida por el titular de la central provincial, Roberto Baradel, y su par de la regional anfitriona, Octavio Miloni, así como por Hugo Yasky.
En este contexto se resolvió avanzar con los plenarios que se vienen realizando en diferentes puntos de la provincia de Buenos Aires con la finalidad de “fortalecer y convocar a la marcha del 17 de agosto en reclamo del otorgamiento de una suma fija para les trabajadores actives a cuenta de convenio, idéntico criterio para jubilados y pensionados, renegociar el acuerdo con el FMI y la creación de una empresa nacional de alimentos”. Y se hizo público “el rechazo a una devaluación”, al tiempo que se repudiaron “las acciones de los grandes formadores de precios”.
Al respecto, Baradel señaló que “estamos trabajando para la construcción de la unidad del movimiento obrero y debemos ser conscientes de que transitamos una nueva etapa en donde tenemos la gran responsabilidad de hacernos escuchar ya que contamos con la legitimidad de haber dado la pelea contra el neoliberalismo y debemos acercar nuestras propuestas”.
Mientras que Yasky, hizo hincapié en que “debemos responder con unidad y tratar de fortalecer el movimiento obrero nacional prestando atención a aquellas cosas que nos unen y dejando de lado las diferencias”, tras lo que instó a “trabajar fuerte para la movilización del 17 de agosto, para darle la pelea a los popes de la UIA, de la cámara de empresarios, de la Sociedad Rural, de la Cámara Argentina de empresarios estadounidenses y de los grandes medios de comunicación que nunca van a elecciones y quieren gobernar el país en desmedro de la clase trabajadora y empobreciendo a los argentinos”.