Un proyecto en tal sentido se presentó en el Congreso Nacional. “Seguiremos luchando por los proyectos que tiendan a mejorar la calidad de vida de las compañeras travestis y trans”, recalcó la integrante de Furia Trava, Florencia Guimaraes.
Días atrás se presentó en la Cámara de Diputados el Proyecto de Ley Lohana Berkins de Inclusión Laboral Formal Trans y Travesti, iniciativa parlamentaria impulsada por las organizaciones que integran la Liga Lgbtiq de las Provincias y la Convocatoria Federal Trans y Travesti Argentina, junto a Gabriela Estévez, entre otros diputados nacionales.
De las organizaciones travestis y trans del interior del país, estuvieron presentes la salteña Cassandra Sand, por Córdoba Ivana Aguilera y la chaqueña Ursula Sabarece.
La iniciativa pretende dar una respuesta integral a la situación de emergencia socio-laboral que atraviesan históricamente a las personas trans y travestis, que según las estadísticas son alarmantes, ya que el 91 por ciento carece de trabajo registrado, mientras que el 82 atribuye las dificultades para acceder a un empleo formal a la discriminación por identidad y expresión de género.
Por su parte, el 45 por ciento está en situación de prostitución, cifra que supera el 85 en el caso de las mujeres y feminidades trans y travestis. El 64 por ciento no tiene cobertura de salud, el 58 fue víctima de violencia institucional por parte de las fuerzas policiales y un dato todavía más terrible: la expectativa de vida de las personas trans y travestis en la Argentina es de 36 años.
Al respecto, la integrante de Furia Trava, Florencia Guimaraes, recordó que “este proyecto lleva el nombre de nuestra compañera y camarada Lohana Berkins y, al igual que el de Diana Sacayan, le pide al Estado la inclusión”.
Y explicó que “por eso no se queda con el término cupo, que es algo limitado, y habla de inclusión que implica algo mucho más amplio que contempla a muchísimas más compañeras”.
También, tras señalar la importancia del proyecto de Inclusión Laboral Lohana Berkins y la Ley de Cupo Diana Sacayan, fue clara al remarcar que “vamos seguir luchando por todos los proyectos que tiendan a mejorar la calidad de vida de las compañeras travestis y trans”.
Y recordó que en el proyecto Lohana Berkins “trabajaron muchísimas compañeras de varias provincias, de Chaco, Salta, Corrientes, del sur” algo que “es muy rico y lo vuelve más federal”.
Tras lo que no ocultó su orgullo cuando destacó que “tenemos proyectos legislativos de dos referentes que han luchado por los derechos que nos fueron cercenados a las travestis y trans” por eso “se merecen este homenaje y muchísimos más”.
Características
El proyecto es el resultado de un proceso participativo y federal que comenzó en el invierno de 2015, y recoge las propuestas y experiencias de cientos de personas trans y travestis de todo el país.
Entre los principales puntos que pretende establecer, declara la emergencia laboral, prohibe el despido de personas trans y travestis por 18 meses y dispone la reincorporación de las personas trans y travestis despedidas del Estado nacional durante los últimos tres años.
Asimismo, instituye un sistema de becas de capacitación para las personas trans y travestis que no reúnan condiciones de idoneidad para las tareas requeridas y compromete a que el Estado las emplee “inmediata y efectivamente” una vez finalizada la formación.
Y reserva, en el sector público nacional, el 1,5 por ciento de los puestos a personas trans y travestis que reúnan las condiciones de idoneidad requeridas.
También establece un sistema de incentivos impositivos para subsidiar -parcialmente y por un periodo de seis años- el salario de las personas trans y travestis que sean contratadas por empresas privadas, priorizando a las MiPyMes.
Crea un programa destinado a la administración pública y el sector privado sobre sensibilización sobre discriminación por identidad y expresión de género, al tiempo que dispone una línea de crédito a tasa cero y una línea de subsidios para emprendimientos y micro-emprendimientos, e incorpora a la Ley de Contrato de Trabajo la prohibición de discriminar por motivo de identidad y expresión de género, así como por antecedentes contravencionales.