La empresa de heladeras, hornos y otros artículos para el hogar Longvie, suspenderá su producción en Paraná hasta febrero y hay temor de despidos. La misma se encuentra en estado de default.
La fábrica ubicada en el Parque Industrial de la capital entrerriana, una de las más importantes de la provincia, acordó suspensiones y comienzo de vacaciones a partir de la semana pasada y los temores de que los trabajadores pierdan su fuente de trabajo crece día a día.
Ante la situación crítica que vive el sector por la apertura indiscriminada de las importaciones, la medida fue acordada con el gremio de la Unión Obrera Metalúrgica (UOM). Las suspensiones y despidos vienen desde hace más de un año y los obreros que aún seguían trabajando cobraban el 75 por ciento del salario que les corresponde.
La empresa informó que inició gestiones con los tenedores de sus obligaciones negociables porque no puede cumplir con los vencimientos por la crisis económica. Las había emitido hace un año. Su deuda financiera es de más de 400 millones de pesos y el 77 por ciento se concentra a corto plazo.
Desde la cúpula anunciaron que reestructurará las obligaciones negociables que emitió hace un año porque no puede afrontar los vencimientos por la crisis económica. Es el segundo default que la crisis provocó en el mercado local, después del de Carsa, uno de los dueños de Megatone, declarado en junio.
En nueve meses de 2018, sintió la retracción en su mercado doméstico debido a la baja del consumo. Las ventas de producción propia cayeron de 240.341 a 181.981 unidades y las de productos de reventa, de 4942 a 3444, según su último balance trimestral.
Cabe destacar, que el sector de Longvie no es el único que está en una grave situación. En todos los rincones del país se está viviendo una ola de despidos alarmante desde que asumió Macri. Con las ventas por el piso, Motomel, de la mano con la fábrica de llantas Protto, adelantaron vacaciones en la planta de San Nicolás porque las ventas no repuntan. Son 400 los empleados afectados y hay temor de despidos. La semana pasada, la empresa metalúrgica Metalkrom, ubicada en Rosario, cerró y dejó a todos sus empleados en la calle.
En este sentido, la semana pasada, el titular del Sindicato de Mecánicos y Afines del Transporte Automotor (SMATA), Ricardo Pignanelli, reveló que “en los próximos meses se van a perder quince mil puestos de trabajo en el sector automotriz” a causa de la recesión que mantiene a las plantas semi paralizadas en este fin de 2018.
La voz del PC
Alejandro Milocco, Secretario del PC de Entre Ríos, advirtió que “se veía venir por todos los despidos y suspensiones que venía haciendo la empresa”.
“Nos solidarizamos con los trabajadores y sus familias, porque es un contexto muy difícil donde aumenta todo y las ventanas del trabajo se están cerrando por las políticas de este gobierno”, sostuvo Milocco.
En esta línea, aseguró que “despidos en una empresa de esta magnitud impactan mucho en una ciudad como Paraná, ya que no es un lugar con mucha industria”. Y, agregó que “no hay mucho empleo privado, y cada uno que se pierde, es un golpe muy duro del que cuesta recuperarse”.
Además, apuntó contra la política nacional de apertura indiscriminada de las importaciones, siendo la razón por la cual diversos sectores industriales están quebrando.
“En el parque industrial venía de discutir paritarias y sus aportes de impuestos a las ganancias. Con este gobierno hoy están pensando en no perder sus fuentes laborales”, recalcó el miembro de la conducción del PC de Entre Ríos.
Por último, Milocco también hizo responsables a los gobiernos provinciales y municipales. “Ambos guardan silencio, sobre todo la provincia que dice que no se despidió a nadie”.
Asimismo, denunció que “hay muchos empleos que dependían del estado como talleres y demás que fueron recortados”, y fue claro cuando dijo que “la cuota para sanar eso es hacer una política que genere puestos de trabajo y empleo, pero este gobierno demostró que está lejos de eso”.