El Partido Comunista de Grecia registró un considerable avance respecto a los comicios de 2019 con lo que logró incrementar su bloque legislativo. “Tenemos la tarea de organizar la lucha”, sostuvo el titular del KKE, Dimitris Koutsoumbas.
El triunfo de la derecha de Nueva Democracia (ND), la caída de la coalición socialdemócrata Syriza y una importante elección del Partido Comunista de Grecia (KKE), es el panorama que dejaron los comicios que se llevaron a cabo el domingo pasado en Grecia. Y de este modo, el líder de ND y actual primer ministro, Kyriakos Mitsotakis, va tener que ir a una segunda vuelta que debería convocarse para julio, ya que el 40,81 obtenido no le alcanza para volver a formar Gobierno.
Pero la buena noticia de la jornada es el crecimiento registrado por el KKE, que con el 7,14 por ciento, registra un considerable avance respecto a los comicios de 2019 y de este modo, va a pasar de tener una bancada legislativa de 26 escaños, esto es once más que en el actual parlamento.
“La rabia del pueblo es un río caudaloso que en las urnas solo se puede expresar de una manera: el fortalecimiento del KKE”, recalcó al respecto el secretario General del KKE, Dimitris Koutsoumbas, tras lo que remarcó que los comunistas asumen la responsabilidad “de enfrentarse a las presiones de este sistema podrido y sus chantajes, que busca atar y manipular al pueblo”, por lo que “tenemos la tarea de organizar la lucha, el contraataque de los trabajadores y del movimiento popular”.
Por lo que al hacerse público el resultado electoral, señaló que “saludamos a los miles de trabajadores y jóvenes que dieron este paso y votaron por el KKE, lo que resultó en su ascenso considerable” y añadió que este resultado “es fruto de la experiencia de los trabajadores y del pueblo que participó en luchas y acciones importantes en los años anteriores junto a los comunistas”.
Asimismo, hizo hincapié en que “las nuevas y viejas fuerzas que se han agrupado en torno a nuestro Partido, pueden hoy dar un nuevo impulso al camino del contraataque popular, a la lucha de clases con características de masas, al reagrupamiento de todo el movimiento sindical, a la promoción de la alianza social contra los monopolios, el capital y el capitalismo”. Y resaltó el fortalecimiento de la influencia política del KKE, “especialmente en importantes centros urbanos del país, en los barrios obreros de las grandes ciudades, en las zonas donde se concentran gran parte de los obreros”.