En La Plata, durante la pasada madrugada, fue vandalizada la fachada de la sede del Partido Comunista de la Provincia de Buenos Aires. Este hecho se suma a otros similares como los que recientemente afectaron a los locales partidarios de Ciudad de Buenos Aires y Bahía Blanca.
“Una vez más les decimos no pasarán y porque no tenemos miedo, continuaremos militando por un mundo más justo, sin explotadores ni explotados”, recalcó el Partido Comunista de la Provincia de Buenos Aires al repudiar el ataque que fue perpetrado contra su sede durante la pasada madrugada.
De acuerdo a lo que pudo establecerse, poco antes de la hora 2, la fachada del edificio ubicado en La Plata fue vandalizada con frases insultantes escritas sobre la imagen de referentes y militantes que fueron secuestrados y desaparecidos por la última dictadura cívico-militar.
“Denunciamos y hacemos público el hecho, ya que no se trata de un evento aislado sino que este accionar es parte del avance neofascista y de la violencia política en nuestro país, que tiene su antecedente más grave en el intento de magnicidio contra Cristina Fernández de Kirchner”, advirtió el PC bonaerense.
Esta aseveración nada tiene de antojadiza. Hace apenas una semana, seguidores de La Libertad Avanza perpetraron un ataque similar contra el local del PC de Bahía Blanca, cuyo frente fue vandalizado con pintadas en las que se leía la frase “Milei 2023” asociada a esvásticas y otros mensajes de tono antidemocrático, pero también mancillaron un mural que honra la memoria de Floreal El Negrito Avellaneda.
Y, hace un mes, frente del local del PC de la Ciudad de Buenos Aires fueron colocadas tres bombas Molotv sobre las baldosas que conmemoran a militantes comunistas desaparecidos. Esto pasó el mismo día en que Victoria Villaruel organizó su acto apologético del terrorismo de Estado en la Legislatura porteña.
Así las cosas, el PC de La Plata, alertó que el que fue perpetrado contra el local partidario, forma parte de una escalda de violencia que se viene llevando a cabo, especialmente, contra militantes de Unión por la Patria, por lo que “a cuarenta años del retorno de la democracia, no podemos permitir que se retomen y profundicen prácticas de violencia, odio y persecución típicas de la dictadura cívico militar”.