El Partido Comunista de la Argentina se pronunció contra los dichos del embajador designado por Donald Trump, que a todas luces buscan profundizar la sumisión del gobierno de Javier Milei a Washington. Reproducimos a continuación el comunicado que hizo público el PCA en sus redes sociales y que lleva la firma de su Secretariado Nacional.
Las declaraciones injerencistas de Peter Lamelas, el embajador yanqui designado para la Argentina por Donald Trump, merecen el repudio conjunto de todas las fuerzas políticas que luchamos por una patria justa, libre y soberana.
Como si se tratara de un virrey llegando a su colonia afirmó desde el Comité de Relaciones Exteriores del Senado estadounidense que Argentina tiene que dejar de relacionarse con la República Popular China y que además trabajará para contrarrestar en la región la "influencia maligna de China, Cuba, Venezuela, Nicaragua e Irán".
Al mismo tiempo, este infame personaje proveniente de la gusanera anticomunista cubana de Miami, dictándole órdenes al poder judicial de nuestro país para que mantenga presa a la expresidenta Cristina Fernández y alertándolo sobre la lucha de los movimientos de izquierda, dejó bien claro que el lawfare y la persecución política no son otra cosa que parte central del guión de Washington para imponer sus intereses.
Como si todo esto fuera poco, Lamelas desconoció nuestro derecho soberano sobre las Malvinas y apuntó a nuestras riquezas naturales como si fueran un verdadero botín de guerra, remarcando que su papel como embajador será el de asegurar que nuestros recursos naturales, nuestra energía y nuestros minerales se entreguen en bandeja a los EEUU.
Sus declaraciones, en definitiva, no hacen más que demostrar la profunda crisis del sistema capitalista y la decadencia que atraviesa el imperialismo yanqui. En tanto que, a la vez, nos reafirman en la necesidad de seguir luchando por la segunda y definitiva Independencia de Nuestra América y por fortalecer un mundo multipolar, concebido para la paz y el desarrollo común. Sin dudas, un primer paso en esa dirección debería ser el de retomar la senda de la unidad regional soberana mediante la Unasur y la Celac y vincularse a instancias de articulación global como los Brics.
En este sentido creemos que resulta fundamental gestar un gran movimiento patriótico y antiimperialista para rechazar el acuerdo con el FMI, la instalación de la base naval yanqui en Ushuaia, el control del ejército estadounidense sobre el Río Paraná y toda acción desestabilizadora de la CIA y el Comando Sur contra nuestro país y nuestra región para impedir que el enemigo jurado de nuestros pueblos aplique, bajo otras formas, un nuevo Plan Cóndor.
En este contexto nacional e internacional la unidad que necesitamos para fortalecer a la Patria es la unidad antiimperialista.
Llamamos a rechazar en las calles el plan de ajuste, entrega y represión del gobierno cipayo de Javier Milei y la designación de Peter Lamelas como embajador de Estados Unidos en nuestro país. Construyamos un Frente Patriótico para la liberación nacional y social.