Hoy tiene lugar un nuevo capítulo de la lucha que vienen llevando adelante los trabajadores del nosocomio. La cita es desde las 18 horas y la marcha va a unir la intersección de las avenidas Callao y Corrientes con el Obelisco. “Levantemos la voz para salvar el hospital que cuida a nuestros hijos”, señala Madres del Garrahan al unirse a la convocatoria.
Los trabajadores del hospital Garrahan definieron, en una asamblea, los próximos pasos en el plan de lucha que llevan adelante contra el ajuste a la salud que sostiene, cada vez con mayor profundidad, el gobierno nacional. La confrontación, propuesta y votada por quienes participaron de la asamblea, quedó planteada de la siguiente manera: una nueva convocatoria a asamblea, la organización de un paro y la movilización por la Ciudad de Buenos Aires. Precisamente, al cierre de esta edición los trabajadores del hospital, junto a la comunidad que acompaña y resiste a la ofensiva del gobierno nacional, se concentran para recorrer, a partir de las 18 horas, el centro porteño, desde Callao y Corrientes hasta el Obelisco. En el marco también de este plan de lucha, el sábado se llevará a cabo en el auditorio de ATE Capital un encuentro con organizaciones sociales y sindicales.
Por otra parte, para el miércoles próximo, está prevista una asamblea general en el hospital. En ella, se discutirá el curso de los acontecimientos y las estrategias adecuadas para fortalecer un plan de lucha que promete intensificarse. El programa de reivindicaciones incluye la defensa del poder adquisitivo de los salarios y la estabilidad de los trabajadores del Garrahan, como así también la preservación del sistema de salud público, universal y gratuito.
Asimismo, la asamblea hizo pública su oposición a la política salarial del gobierno, y a una paritaria que no dudó en calificar como una “paritaria de hambre”. La misma, como es costumbre a esta altura, fue “acordada” recientemente a espaldas de los trabajadores, sellada por el gobierno nacional y la Unión de Personal Civil de la Nación (Upcn). El “acuerdo” impuesto por el gobierno y avalado por Upcn contempla un aumento del 1,3 por ciento para junio, julio y agosto, un incremento del 1,2 en septiembre y octubre y del 1,1 para noviembre. Además, contempla el pago de tres bonos de apenas veinticinco mil pesos y otros tres de veinte mil.
“La paritaria es el resultado del diálogo entre el gobierno y Upcn”, lamentó Víctor Pichihua, quien es técnico auxiliar en anatomía patológica en el Garrahan y militante del Partido Comunista. Para Pichihua, lo acordado por la burocracia, comandada por Andrés Rodríguez, “sigue siendo una miseria”, ya que se ubica considerablemente por debajo del índice de inflación, incluso de aquel que reconoce el propio Indec.
A la complicidad de Upcn con el gobierno se le suma la política de fragmentación y debilitamiento que el gobierno nacional quiere instalar entre los trabajadores, estableciendo diferencias entre médicos, residentes, administrativos y trabajadores de maestranza. En ese sentido, Pichuhua denunció que lo que busca el gobierno es “confrontar a los residentes y al resto del personal del hospital”. Con este propósito, “sacaron a la mitad del personal de limpieza y decidieron contratar a otra empresa”, a la vez que “echan a correr que la nueva prestadora volvería a contratar a una parte de los trabajadores ya despedidos, pero sin reconocerles la antigüedad”. Este mismo esquema también se haría efectivo con el personal de seguridad que se desempeña en el nosocomio, ya que “al parecer se va a hacer cargo una empresa que contrata a ex militares, algo que no parece muy descabellado teniendo en cuenta todas las restricciones que están poniendo en el hospital”.
Con este telón de fondo, remarcó que “después de la gran convocatoria que tuvo la última marcha hacia Plaza de Mayo, se vio el enorme apoyo que tenemos no sólo de los sectores de la salud, sino también por parte de otros trabajadores estatales y del sector privado y de organizaciones sociales”, porque al tiempo que “recrudecen las políticas del gobierno, va escalando el apoyo y quizás también lo haga la toma de conciencia sobre lo que sucede con el Garrahan”.
En este sentido, puntualizó que después de la movilización de hoy y el encuentro plenario del próximo sábado, “habrá que hacer un balance de lo hecho y decidir la agenda a seguir que podría incluir un nuevo paro”, porque “a pesar de que venimos de semanas de lucha y se va viendo el cansancio entre los compañeros, tenemos claro qué es lo que necesitamos y cuáles son las respuestas que debemos dar”.
En este escenario, un madres de pacientes del Hospital Garrahan se vienen organizando para hacer público su apoyo a la marcha de velas que hoy van a protagonizar los trabajadores del nosocomio junto a otros sectores que apoyan la lucha que vienen realizando. “Levantemos la voz para salvar el hospital que cuida a nuestros hijos”, señala la convocatoria que hace Madres del Garrahan y añade que “¡El Hospital no se toca!” por lo que recalca que resulta preciso “levantar la voz para salvar el hospital que cuida a nuestros hijos”.