Desde Chile, Uruguay y Brasil, los comunistas fijaron su postura respecto a la decisión de la Corte Suprema. También lo hicieron el Alba-TCP y el gobierno de Venezuela. “Fuerza estimada Cristina”, escribió Miguel Díaz-Canel Bermúdez en su cuenta de la red social X.
Diferentes voces de la región y el resto del planeta se alzaron durante los últimos días para denunciar la situación que atraviesa la ex presidenta Cristina Fernández de Kirchner. Una de ellas es la del Partido Comunista de Uruguay, que calificó como “grave situación institucional” la que se vive Argentina y al respecto hizo público su rechazo “a la utilización de la justicia como arma política”, al tiempo que expresó su preocupación “ante la degradación democrática que vive nuestro país hermano como resultado del accionar del gobierno de ultraderecha encabezado por Javier Milei y las clases dominantes argentinas”.
Sin dudarlo, el PCU añadió que “las denuncias de que el proceso contra la ex presidenta argentina estuvo viciado de nulidad y obedeció a una clara y explícita intención política de proscribirla, indican que estamos ante un nuevo caso de lawfare judicial” una práctica que, advirtió, “tiene varios y graves antecedentes en nuestro continente”.
Por su parte, en idéntica dirección se pronunció el Partido Comunista de Brasil (PCdoB) que condenó la persecución judicial contra Cristina Kirchner, por lo que al expresar su “profunda preocupación por los ataques a la democracia en Argentina”, sostuvo que su situación representa “otro claro ejemplo de guerra jurídica utilizada para criminalizar a líderes populares y socavar proyectos políticos que sirven a los intereses del pueblo”, por lo que reafirmó su compromiso con la solidaridad internacional y la lucha contra el avance de la extrema derecha en América Latina y añadió que el propósito que persigue la ratificación de la condena en la causa Vialidad es “silenciar la voz de una líder democrática y progresista”.
A su vez, el Partido Comunista de Chile (PCCh), aseveró que en nuestro país se vive una crisis institucional a raíz de la decisión adoptada por la Corte Suprema que ratifica la condena que inhabilita de por vida a Cristina Fernández, a quien expresa su solidaridad y la hace extensiva a “las organizaciones populares de este pueblo hermano, movilizadas por la exigencia de imparcialidad de la justicia y contra la utilización de los tribunales con fines políticos ajenos a las normas propias de un debido proceso”.
Del mismo modo, alerta que lejos de ser un hecho aislado, la sentencia contra CFK forma parte de un patrón regional. “Lo que hoy ocurre en Argentina ya lo hemos visto en otros países de la región”, puntualiza el PCCh y señala que “es la estrategia de la oligarquía regional, en alianza con poderes económicos, mediáticos y judiciales, para eliminar a dirigentes que encarnan proyectos de justicia social, soberanía nacional y democratización de la riqueza”.
Mientras tanto, la Alianza Bolivariana para los Pueblos de Nuestra América-Tratado de Comercio de los Pueblos (Alba-TCP) rechazó firmemente “el ilegítimo fallo” de la Corte Suprema que ratificó la condena que pesa contra Cristina Fernández, a la que calificó como “una maniobra política disfrazada de sentencia judicial, ejecutada por un sistema de justicia subordinado al poder de turno y usado para la persecución”, algo que “forma parte del lawfare, herramienta del neocolonialismo, para proscribir y aplastar a los liderazgos populares que representan a nuestras mayorías”.
Por su lado, el gobierno de la República Bolivariana de Venezuela aseveró que lo que consumó la Corte en la causa Vialidad es un “golpe político y judicial”, enmarcado en “una persecución brutal impulsada desde un Poder Judicial subordinado al proyecto autoritario del presidente Javier Milei”, en tanto que denunció que se trata de un “fallo ilegítimo e ilegal que busca inhabilitar por la fuerza a quien representa el corazón político y emocional de millones de argentinas y argentinos”. Por lo cual, afirmó que “no se trata de justicia, se trata de borrar al adversario con métodos coloniales”.
En una misma dirección se pronunció el presidente de Cuba, Miguel Díaz-Canel Bermúdez, quien utilizó la red social X para reafirmar “nuestro invariable apoyo a @CFKArgentina ante episodio de judicialización política”, al tiempo que advirtió que “una vez más se utiliza la justicia con motivaciones políticas como instrumento de la derecha contra referentes progresistas de la región”.
* La ilustración de portada de la nota es un aporte de Sergio Ibaceta.