Casación Penal rechazó el pedido de libertad que presentó la defensa de Daniel Vera, quien está en prisión domiciliaria por denunciar en redes sociales el genocidio que el Estado de Israel perpetra contra el pueblo palestino y criticar a Javier Milei.
La Cámara de Casación Penal rechazó el pedido de libertad que presentó la defensa de Daniel Vera, quien de este modo va a continuar bajo un régimen de prisión domiciliaria hasta que se lleve a cabo el juicio en el que se lo acusa de una presunta “amenaza al presidente”, que se le sustanciará por denunciar en redes sociales el genocidio que el Estado de Israel perpetra contra el pueblo palestino y criticar a Javier Milei.
El calvario de este docente jubilado y trabajador de la Obra Social Para La Actividad Docente (Osplad) comenzó el 2 de julio cuando su vivienda ubicada en la ciudad de Resistencia, fue allanada por personal de la Policía de la Ciudad de Buenos Aires en el marco de un operativo de ciberpatrullaje, respondiendo a una orden dictada por el Juzgado Criminal y Correccional Federal 4 a cargo del juez Federal Ariel Oscar Lijo.
Vale señalar que, tras ser detenido, Vera pasó dos días alojado en una comisaría desde donde fue trasladado a una prisión en la que permaneció una semana, hasta que con el aporte del Comité contra la Tortura de Chaco, su defensa consiguió que pueda ser enviado a su domicilio. Allí sigue privado de su libertad a raíz de las imputaciones que se le hacen, las que tienen una expectativa de una pena máxima de tres años y excarcelable.
Como tantas otras personas en todo el mundo, Vera nunca ocultó su compromiso con la causa palestina y, por lo tanto, suele compartir posteos en tal sentido en distintos grupos de Facebook, tal como lo indica en una reciente carta que hizo pública, en la que cuenta que fue apresado por publicar bajo el perfil de Elpidio Sánchez su “repudio por el genocidio y los crímenes de guerra que está padeciendo el pueblo de Palestina en la Palestina ocupada” y por “visibilizar a algunos de los responsables de nuestro gobierno y sus operadores y locutores mediáticos, que están llevando adelante un plan de entrega del país por medio del endeudamiento y la represión”.
Asimismo, Vera sostiene que escribe esa misiva “para explicar la situación que me toca vivir en el marco de la instauración de un sistema represivo, necesario para la puesta en marcha del plan de saqueo que lleva adelante el gobierno, sistema represivo que a finales del año pasado creó una brigada de ciberpatrullaje, de la Policía de la Ciudad, para realizar rastrillaje de redes sociales, infiltración en correos electrónicos, chats y otras posibilidades del universo virtual, y en febrero de este año sacó el decreto que legitima tal práctica”. Y recuerda que durante febrero pasado esa brigada comenzó a investigar a un grupo de Facebook llamado “Por Palestina” en el que él hizo algunas publicacione “de orden político, económico y social que ponen en evidencia la política de hambre y entrega que se está llevando a cabo”.
En este contexto, tras rechazar la apelación presentada para que el docente jubilado recuperara su libertad, el juez le dictó el procesamiento por coacción con el agravante de incitación al odio en contra de una minoría, procedimiento que se completó cuando el 22 de julio rechazó un segundo pedido de apelación que representaba la última posibilidad para que quedara en libertad.
En su carta, Vera puntualiza que quiere poner en claro “la tergiversación que realizaron los operadores mediáticos al presentarme, y encuadrarme, como el ‘enemigo’ que el poder está construyendo” y “dar las gracias a todos los que han expresado su apoyo, solidaridad y afecto”. En esta dirección, reconoció especialmente la postura adoptada por el Comité contra la Tortura “que desde el primer momento acompañó y presentó dos habeas corpus para reclamar por las condiciones de mi detención y evitar mi traslado a la cárcel”.