“Son actos de piratería y una descarada escalada de la agresión imperialista contra los pueblos de América Latina”, denunció el Partido Comunista de EE.UU. al referirse a las acciones militares que la IV Flota del Comando Sur despliega en el Caribe “bajo el fraudulento pretexto de combatir el terrorismo y las drogas”.
El Partido Comunista de Estados Unidos (PCUsa) hizo pública su condena “enérgica” a la confiscación ilegal de los petroleros venezolanos por parte del gobierno estadounidense, algo que definió como “un acto de piratería y una descarada escalada de la agresión imperialista contra los pueblos de América Latina”, que lleva a cabo la Administración Trump, “bajo el fraudulento pretexto de combatir el terrorismo y las drogas”.
Al respecto, el PCUsa advirtió que este tipo de “acciones criminales”, persiguen como propósito “provocar un conflicto con el pueblo venezolano, dando luz verde a una operación largamente buscada para apoderarse de los vastos recursos petroleros del país para beneficio de las grandes petroleras”, al tiempo que también constituyen “un ataque deliberado contra el pueblo cubano, que es otro blanco del imperialismo estadounidense”.
En tal sentido denunció que mediante estas acciones también se pronuncia el bloqueo “al robar petróleo que se enviaba a Cuba, algo que es tan necesario para sostener su economía”. En este caso, la excusa que la Administración Trump está utilizando es “la ilegítima y fallida designación de ‘Estado Patrocinador del Terrorismo’ para infligir el máximo sufrimiento al pueblo cubano”.
Por otra parte, apuntó que el reconocimiento manifestado por Donald Trump sobre las intenciones de quedarse con el cargamento robado “expone aún más sus motivos de saqueo y dominación imperialista”.
En esta misma línea, el PC de EEUU recordó que “este acto de piratería se produce tras un masivo despliegue militar en la región, que incluye el asesinato de más de ochenta personas en el Mar Caribe y llamamientos directos de los halcones de la guerra en Estados Unidos a un ataque terrestre contra Venezuela”. Y complementó agregando que estas acciones “sirven explícitamente para imponer el llamado ‘Corolario Trump’, que busca reafirmar violentamente la Doctrina Monroe y la hegemonía estadounidense en su supuesta ‘esfera de influencia’”.
En medio de la escalada belicista, señaló que “el pueblo estadounidense, cuyo setenta por ciento se opone a la intervención en Venezuela, debe ver este acto como una peligrosa provocación a otra guerra de agresión” y manifestó su solidaridad con los pueblos de Venezuela y Cuba “en su lucha contra el imperialismo estadounidense”.
Por último, instó “a la clase trabajadora y a todos los pueblos amantes de la paz en Estados Unidos a exigir el fin inmediato de todas las sanciones, bloqueos y actos criminales de agresión”, así como “a oponerse militantemente a esta criminal tendencia bélica”.