Así lo definió desde La Fede de la provincia de Córdoba, Virginia Patiño, en “este centenario que atravesamos en una coyuntura bastante compleja”.
“Tenemos que disputarle la juventud a la burguesía y ahí nosotros como una de las fuerzas de izquierda mas avanzadas tenemos un papel dentro del movimiento popular”, recalcó desde La Fede de la provincia de Córdoba, Virginia Patiño y recordó que “atravesamos este centenario en una coyuntura bastante compleja por la pandemia, la crisis económica y una crisis humanitaria”.
Al respecto señaló que “todo esto configura un escenario muy complejo”, en cuyo contexto “nuestro deber como comunistas, es ahora redoblar esfuerzos para poder atravesarlo”.
Y, para eso, “hay que seguir discutiendo, profundizando y generando posiciones respecto a la coyuntura”, así como “poder ir reconfigurando nuestra organización a lo que es preciso para este contexto y los desafíos de nuevas formas de militar”.
En este sentido destacó que “tenemos un desafío muy grande en este momento histórico que nos atraviesa como juventud en muchos sentidos”, ya que “este sistema nos vapulea constantemente” porque “estamos viviendo una guerra de nuevo tipo que afecta mucho a la juventud especialmente, que cada vez ve que las condiciones de vida van empeorando”.
Y recalcó que “debemos disputarle la juventud a la burguesía y ahí nosotros, como una de las fuerzas de izquierda más avanzadas, tenemos un papel dentro del movimiento popular”.
Así las cosas, Virginia Patiño, plantea que es preciso dar la disputa por el sentido en un escenario cada vez más complicado. “El escenario que se nos presenta es complejo, yo milito en la base entre los sectores más empobrecidos y ahí vemos mucha influencia de los sectores fascistas”, resaltó y añadió que “por eso es muy importante poder ofrecer a la juventud, para interpelarla, una propuesta hecha a partir de nuestro enfoque de construcción popular”.
Tras lo que dijo que “el deber de la juventud, es poder dar esa batalla ideológica en todo el territorio, para poder llevar este proyecto político y revolucionario hacia las masas, para que ellas generen y vayan desarrollando esa conciencia de clase que permite ver que nadie se salva solo y que el capitalismo, de ninguna manera, puede ser humanizado”.
Por eso “debemos trabajar mucho en la construcción de poder popular que no es, ni más ni menos, que apelar al desarrollo de conciencia a través de nuestras herramientas y trabajo que llevamos a cabo en los territorios”. Ya que “como fuerza política para disputar y seguir generando conciencia revolucionaria”.