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El juez Federal Sebastián Ramos le mintió a la Comisión de Juicio Político del Senado que ahora espera al fiscal Carlos Stornelli.  

Después de una reunión en la que quedó expuesto que a veces la mentira tiene las patas muy cortas, se espera que el martes 7 de marzo se presente ante la Comisión de Juicio Político de Diputados, alguien que conoce bastante de qué va esto de mentir. El fiscal Carlos Stornelli fue convocado por los representantes del oficialismo en la Comisión para que, tal como lo señaló el diputado Germán Martínez, aclare “por qué consideraba que había que archivar en tiempo récord durante la feria judicial” la causa que investiga los posibles vínculos entre la Corte Suprema y dirigentes de Juntos por el Cambio, que además son funcionarios del Gobierno de la Ciudad.

Y precisamente sobre esos vínculos es que se habló en la Comisión durante la reunión del jueves pasado. Ahí, el juez Federal de La Plata, Alejo Ramos Padilla, explicó por qué se declaró incompetente para investigar la denuncia que Axel Kicillof hizo contra Silvio Robles, por lo que remitió las actuaciones a Comodoro Py advirtiendo que no hay pruebas para aseverar que la filtración de los chats que dieron origen a esa denuncia surgió de un acto de espionaje ilegal.

Cabe recordar que la del espionaje ilegal, es la hipótesis que sostiene Juntos por el Cambio para desacreditar todo lo que surge de esos chat que se revelan un nivel obsceno de connivencia entre el ministro de Seguridad de la Ciudad de Buenos Aires, Marcelo D’Alessandro, jueces federales, funcionarios de esa jurisdicción, ex agentes de inteligencia y directivos del Grupo Clarín. Ahí también aparece Robles.

Ese mismo día se presentó ante la Comisión de Diputados el juez Federal Sebastián Ramos, que es quien a instancias del fiscal Stornelli, archivó en tiempo récord la denuncia de Kicillof contra Robles que es la mano derecha del titular de la Corte Suprema y del Consejo de la Magistratura, Horacio Rosatti.

Cuando en la Comisión Martínez le preguntó si conocía a D’Alessandro, Ramos puso cara de de 10 de Copas y dijo que no. Tras cartón apareció un nuevo hilo de chats con audio incluido, en los que queda claro que el ministro de Seguridad y Ramos no sólo se conocen sino que tienen un elevado nivel de familiaridad.

“Resulta crucial que se pueda avanzar en el juicio político a la Corte”, recalcó desde el Partido Comunista Zaira Abraham Hom y advirtió que “el clima político de época es el lafware, el golpe de Estado a través de las instituciones judiciales y tenemos muchas muestras de esto en nuestro país con la persecución a líderes políticos como Milagro Sala que sigue presa”.

De ahí que hiciera hincapié en que “esta es la posibilidad de juntar las pruebas y destituir a quienes están en la Corte con el único objetivo de hacer más daño a la clase trabajadora, de profundizar la desigualdad y garantizar la impunidad del macrismo”.

Y después de añadir que “es una señal muy positiva que podamos iniciar un juicio a esta Corte que también desestabiliza al Gobierno Nacional y permite la proscripción de la vicepresidenta”, remarcó que lo que hace y deja de hacer el Poder Judicial, “afecta cuestiones de la vida cotidiana de las personas, tal como queda demostrado con el criterio que la Corte toma respecto a los aumentos de servicios básicos como el de electricidad e Internet”.