Por medio de un acuerdo que suscribieron Roberto Baradel y Martín Sabbatella, Suteba y Acumar articulan para fortalecer la educación ambiental.
El secretario general de Suteba, Roberto Baradel, y el titular del Acumar Martín Sabbatella, firmaron un convenio entre el sindicato docente y la Autoridad de Cuenca Matanza-Riachuelo (Acumar), para capacitar a los docentes en el cuidado del ambiente y articular proyectos pedagógicos que sigan fortaleciendo la educación ambiental integral.
Al respecto, el integrante del Observatorio Ambiental de Trabajo Docente Nuestramerica de La Violeta y Suteba, Pablo Moren, indicó que “es muy importante que nuestro sindicato tenga trabajo en común con la Autoridad de Cuenca Matanza Riachuelo, para que nuestros compañeros se formen en educación ambiental” y destacó que ese organismo nacional, “tiene un trabajo muy difícil en cuanto a la limpieza de ese curso de agua que bordea municipios de provincia de Buenos Aires y la Ciudad de Buenos Aires que es la jurisdicción que menos cumple en cuanto a la aplicación de medidas de control que están establecidas por el Acumar”.
Asimismo, en tal dirección, lamentó que la Ciudad sea reticente a aplicar un abordaje claro respecto a la problemática medioambiental. “Vemos que la Ciudad de Buenos Aires no tiene una política ambiental definida”, advirtió y valoró positivamente que en el territorio bonaerense las cosas sean diferentes. “La provincia de Buenos Aires lleva adelante políticas públicas para que la educación ambiental llegue a las escuelas” destacó Moren.
Por otra parte, el dirigente sindical sostuvo que “como trabajadores de la educación, nos parece muy importante difundir las consignas de la educación ambiental ya que vemos que los docentes somos primordiales para generar un cambio de consciencia en nuestros estudiantes que son el futuro” pero, recalcó, “esa educación ambiental debe ser crítica”.
También manifestó que es preciso tener claro que “las corporaciones transnacionales, casi todas de capitales anglosajones, son las que depredan el ambiente y las que talan cientos de hectáreas de bosques nativos para llevar adelante emprendimientos de monocultivos utilizando millones de litros de glifosato” y que idéntica conducta tienen “las megaempresas mineras que explotan la cordillera de Los Andes dejando miles de litros de cianuro a cielo abierto”.
Moren además recordó que se trata de actividades que “depredan nuestros bienes comunes como el agua, suelo y tierras fértiles, dejando a miles de personas enfermas de cáncer como consecuencia de tóxicos como el glifosato como del cianuro”. Y advirtió que “en esto debe ser crítica la educación ambiental”.