Desde el gobierno dicen que “la sociedad acompaña” el paquetazo de ajuste que intenta imponer Javier Milei, pero se multiplica la formación de multisectoriales. “Sabemos que vamos a tener varias batallas”, señaló Mario Micheli en la conformación de la de Cañuelas.
Enero arrancó con aumentos del orden del 4,6 por ciento en los alimentos durante la primera semana, con una fuerte escalada de los precios en panificados, azúcar y carne bovina, mientras que las listas de precios que llegaron durante la segunda semana a pequeños comercios y supermercados chinos, registran nuevas subas que en este caso promedian el veinte por ciento lo que señala que lejos de morigerarse, la aceleración se sostiene y profundiza.
Así lo revela un informe que confeccionó la consultora LCG en el que se da cuenta de que si se toman las últimas cuatro semanas hasta ese momento, los precios de alimentos básicos para la canasta se catapultaron alrededor del 41 por ciento. Y todo esto en un contexto global en el que los precios de los alimentos bajaron durante 2023, lo que explica una vez más el carácter depredador de la clase capitalista que actúa en el país y en especial la de aquellos actores que por medio de una veintena de empresas cartelizadas y una estrategia de integración vertical y horizontal, poseen el ochenta por ciento de la industria alimenticia lo que les permite construir una posición dominante desde la que imponen precios que maximizan su tasa de rentabilidad mientras inflan el IPC.
Por eso es que tal como lo señala un informe recientemente publicado por la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO), durante 2023 en el mundo los precios de los alimentos estuvieron un 13,7 por ciento por debajo del precio promedio que habían tenido un año antes, pero en Argentina no paran de crecer.
Entonces y con este telón de fondo ¿será tan claro que, como dice Luis Caputo, “la sociedad acompaña” el paquetazo de ajuste que intenta imponer Javier Milei? En todo el país se vienen organizando multisectoriales para resistir el pustch gubernamental y, en particular, en el territorio bonaerense donde durante la semana pasada hubo citas en Avellaneda, La Plata, San Miguel, Moreno, La Matanza, San Martín, Esteban Echeverría, Hurlingham, Ituzaingó, Mar del Plata, Bahía Blanca, Carmen de Patagones, Tres Arroyos, Olavarría, Baradero, Pehuajó y Cañuelas.
Y precisamente en Cañuelas, en la Casa de Todos, se llevó adelante la reunión inaugural de la multisectorial local en la que se coincidió en que el gobierno nacional perpetra
“una estafa electoral”, cuando intenta imponer el paquetazo que arrancó con el DNU 70/2023 y el Protocolo Bullrich, para proseguir con el proyecto denominado “Ley Ómnibus” que el ejecutivo envió al Congreso y que de acuerdo a las amenazas de Federico Sturzenegger, apenas representa un cuarenta por ciento de las medidas que espera adoptar el ejecutivo.
Por eso dijeron presente representantes de la CGT regional, la CTA, la Unión de Trabajadores y Trabajadoras de la Economía Popular, junto a organizaciones políticas y sociales, entre ellas el Partido Comunista y el Movimiento Territorial Liberación. “Nos une la situación social y política de la Argentina”, resaltó el secretario de la CTA de los Trabajadores Regional Cañuelas-Lobos, Mario Micheli, a la hora de dirigirse a los presentes.
Y, en idéntica dirección, hizo hincapié en que “este presidente superó todos los límites, ya que actúa como un dictador”, al tiempo que puntualizó que Milei es protagonista de “una gran estafa electoral que impone toda una serie de medidas que recayeron contra los trabajadores”, tras lo que celebró que, “por suerte, la reforma laboral fue rechazada, aunque sea en primera instancia, por el Poder Judicial” en lo que representa “nuestro primer triunfo, pero sabemos que acá vamos a tener varias batallas”.