Ante la situación que vive Rosario y el asesinato de los trabajadores del taxi, Héctor Figueroa y Diego Celentano, la ATC advirtió que “ahora el hecho de que salir a trabajar puede costar la vida”.
La Asociación Taxistas de Capital (ATC), hizo pública su solidaridad con las familias y compañeros de trabajo de Héctor Figueroa y Diego Celentano, que son los dos taxistas asesinados días atrás en Rosario, en episodios que fueron atribuidos a la ola de violencia desatada por bandas dedicadas al narcotráfico.
También hizo extensiva su actitud solidaria con las organizaciones gremiales del taxi y “con todo el pueblo trabajador y la sociedad rosarina” que es “atacada por grupos narcos han desatado una escalada de violencia criminal” en cuyo contexto, recordó ATC, también fueron ultimados el colectivero Marcos Daloia y Bruno Bussanich, quien se desempeñaba como playero en una estación de servicio.
“A la crisis económica social provocada por una política del gobierno nacional que achica considerablemente los ingresos de nuestros compañeros, se le suma que deben soportar la actividad ilegal de aplicaciones que precarizan todo marco regulatorio en el sector”, recordó ATC y añadió que, como si esto fuera poco, “ahora hay se añade el hecho de que salir a trabajar puede costar la vida”.
Y, en este sentido, recordó que desde hace mucho “se vienen ensayando medidas represivas, con sus correspondientes despliegues de tropas federales que hoy, nuevamente, evidencian su fracaso” y apuntó sus dardos contra la ministra de Seguridad Patricia Bullrich, que “vuelve a plantear lo mismo”, esta vez “junto al gobernador de Santa Fe Maximiliano Pullaro y al intendente de Rosario Pablo Javkin, sin nombrar a quienes realmente manejan y se benefician con el narcotráfico”.
Tras lo que hace hincapié en que “los trabajadores y sus organizaciones sociales planteamos que la violencia narco se combate cortando sus vínculos con los sectores del poder político, policial y económico”, así como por medio de la aplicación de “soluciones de fondo a los graves problemas de pobreza y desigualdad”.
Y añade por medio de una declaración que lleva la firma de su presidente, Luis Fernández y la de su secretario Sergio Quintela, ATC advierte que “para desarticular el narcotráfico hay que terminar con los mecanismos financieros que permiten el blanqueo de capitales de los empresarios y políticos asociados y de la policía”.