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Mar, Abr
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La sede de Concejo Deliberante de la capital provincial, fue escenario de represión contra integrantes del colectivo trans que ejercían su derecho a peticionar.

Como un acto de “violencia verbal inusitada”, definió la Corriente Nacional Lohana Berkins a la actitud del bloque oficialista del Concejo Deliberante de la ciudad de San Luis, que cargó contra integrantes del colectivo trans que exigían que se aprobara un proyecto de repudio contra la directora de Recursos Humanos, Adriana Garro, a raíz de expresiones discriminatorias que la funcionaria hacia una ex empleada, Karla Heredia.

El bloque Unión por San Luis que había impulsado la iniciativa pretendía que el cuerpo se pronunciara, mientras que desde Cambia San Luis impulsaban la vuelta comisión, lo que provocó la reacción de quienes querían que se tratara la iniciativa sobre tablas.

En ese contexto, la concejal Mixci Lizbeth Huatay Otiniano y la presidenta del cuerpo, Agustina Arancibia Rodríguez, agredieron a quienes intentaban hacer oír sus voces y ordenaron a personal de la policía provincial las reprimiera.

“La presidenta del Concejo, al mejor estilo de la dictadura militar, recurrió al pedido de represión cuando el cuerpo que preside se le tornó inmanejable ante los reiterados atropellos que sufre la colectiva en la casa del pueblo, que es también nuestra y cuya institucionalidad defenderemos siempre”, denunció la Corriente Lohana Berkins.

Pero también hizo hincapié en que no resulta extraña la actitud adoptada por Arancibia Rodríguez, ya que “hace un mes y medio se niega a cumplir una decisión judicial de reincorporación de quince empleados que fueron arbitrariamente despedidos de la institución, generando una deuda de 150 mil pesos por día, en carácter de multa, que seguramente pagaremos todos los vecinos de la ciudad por una rebeldía judicial, nunca vista en ese cuerpo”.

Tras lo que reconoció públicamente la actitud de concejales de bancadas opositoras al oficialismo que responde al intendente, Gastón Hissa, “que pusieron sus cuerpos para defendernos de la embestida policial” y fue clara al puntualizar que “quienes siembran violencias, cosecharán tempestades del poder popular por el que consiguieron sus bancas bajo un sistema que detestan, la democracia”.