Sin Paso, este domingo los cordobeses elegirán gobernador, vice y legisladores provinciales. Para enfrentar a la derecha, los comunistas participarán en las listas del frente Creo en Córdoba de Todos. “Lo que está en juego es el modelo político y económico del cordobesismo” dijo Florencia Dahbar, integrante del secretariado provincial del PC.
Este domingo hay elecciones en Córdoba y los comunistas son protagonistas en las listas del frente Creo en Córdoba de Todos, encabezadas por los candidatos Federico Alesandri y Gabriela Estévez a gobernador y vicegobernadora, quienes buscarán hacerle frente a las listas de la derecha, especialmente a las representadas por el cordobesismo y Juntos por el Cambio. Los comicios definirán la fórmula que gobernará la provincia durante los próximos cuatro años. Además se eligen legisladores provinciales, titulares y suplentes.
“Los comunistas en estas elecciones tenemos nuestra voz, principalmente con el camarada Rodolfo Leyria, trabajador de Epec, delegado de Luz y Fuerza y presidente del cuerpo de delegados del gremio” dijo Florencia Dahbar, médica e integrante del secretariado provincial del Partido Comunista de Córdoba. Por su parte, la doctora en matemáticas, docente universitaria y ex decana de la Facultad de Matemática, Astronomía, Física y Computación de la Universidad Nacional de Córdoba, Esther Galina, es candidata a legisladora por el PC en el distrito capital. También entre los postulantes comunistas se encuentran Fabiana Sued y Graciela Cusido, militantes de la Conat y ATE; Franca de Pascuale que es secretaria política de La Fede de Córdoba; Emiliano Ferreyra, militante de la economía social y el cooperativismo en Alta Gracia; y Luis Llugdar, quien es referente del comunismo en Dean Funes.
Sobre la disputa política del domingo, Dahbar señaló que “desde el Partido Comunista consideramos que lo que se pone en juego este domingo es muy grande dado que lo que está en cuestión es un modelo de gobierno, un modelo que en Córdoba fue instaurado con el navarrazo y la dictadura y consolidado posteriormente durante los últimos 24 años”. Este modelo “es el modelo del cordobesismo, un modelo que sistemáticamente benefició a los sectores más concentrados de la economía, en desmedro de los trabajadores”, añadió.
Las consecuencias de estas políticas se extendieron en el tiempo, con efectos muy presentes en la actualidad. En efecto, para la dirigente del PC “estamos en una provincia donde los niveles de pobreza e indigencia superan a la media nacional y donde los niveles de precarización laboral son altísimos, no solo en el sector privado sino también en el sector público”.
El despojo que sufren amplios sectores de la sociedad cordobesa es una de las caras del modelo mediterráneo. “La cara de la pobreza, de la indigencia y la precarización laboral en Córdoba tiene su contracara y es lo que nosotros queremos discutir” dijo Dahbar. Se trata del “problema de la riqueza en Córdoba, de la concentración obscena de la riqueza que hay”, amplió. Esta concentración, recordó, “fue favorecida por este modelo que nosotros estamos poniendo en cuestión” e hizo hincapié que “desde el punto de vista económico hay un modelo agroexportador que fue el más beneficiado junto con el sistema inmobiliario”.
Por ejemplo, “el sector agroexportador y el sistema inmobiliario en Córdoba han destruido nuestros bosques nativos”. Los agroexportadores, por un lado “se la llevan toda” y por el otro “con el monocultivo destruyen nuestro suelo”, a la vez que “intoxican a nuestras poblaciones con el glifosato”, denunció la dirigente. Por su parte, “el sector inmobiliario se dedicó a construir casas y countries para los sectores más ricos de la provincia”. Por ello, “decimos que estamos ante una crisis medioambiental e hídrica sin precedentes y que un próximo gobierno definitivamente se tiene que ocupar de estos temas”.
A su vez hubo recortes presupuestarios en áreas muy sensibles como son salud y educación, por eso ambos sectores se movilizaron y se movilizan fuertemente por mejora en los salarios y por mejoras en las condiciones edilicias. En este contexto, “estamos poniendo en cuestionamiento no solo el modelo económico, sino también un tipo de orden que el cordobesismo instauró, un orden basado en la represión policial y en el gatillo fácil que tiene su blanco favorito en los pibes morochos y pertenecientes a los barrios humildes de la provincia”.
Bajo estas condiciones, Dahbar comentó que “nuestra campaña se centró en plantear que este modelo de injusticia, pobreza y represión no puede continuar, que el pueblo tiene que tener una voz en la legislatura y desde allí desarrollar otro modelo, un modelo alternativo que tenga a los trabajadores y al pueblo como protagonistas y como centro de las políticas públicas”.
Y, en este sentido, hizo hincapié en que “apostamos al desarrollo del sector industrial, a la generación de empleo de las ramas productivas que aportan valor agregado y saber a nuestras materias primas” a la vez que, añadió, “queremos estimular el crecimiento y el desarrollo de la economía social y cooperativa, bajo un paradigma que respete al medio ambiente y que garantice la tierra y la vivienda para todos y todas”.