Murió disfrutando de absoluta impunidad Henry Kissinger, uno de los protagonistas clave de algunas de las historias más abyectas escritas por el imperialismo.
A los cien años falleció Henry Kissinger y su deceso volvió a revivir algunas de las historias más abyectas del imperialismo, que tienen como uno de sus protagonistas a quien fuera secretario de Estado de demócratas y republicanos, así como amigo y mentor de dictadorescomo Augusto Pinochet y Jorge Rafael Videla.
“Fue uno de los más importantes sostenedores de las dictaduras de la seguridad nacional en toda Nuestra América”, sostuvo la periodista Stella Calloni, quien tras reconocer que Kissinger que fue “un personaje importantísimo que se ha mantenido a través de la historia”, recordó que siempre “mostró ser un tanque pensante, es decir, una gran cabeza pensante al servicio del mal”.
Pero también que desde muy joven fue reclutado por el Clan Rockefeller, que resultó ser el que le allanó el camino que rápidamente lo llevaría a convertirse en asesor en el Consejo Nacional de Seguridad de EE.UU. “Siempre fue y actuó como un anticomunista, antisocialista y antipueblo”, puntualizó Stella Calloni y señaló que desde esa mirada actuó en la Coordinación de Operaciones de
Seguridad estadounidense “y tuvo muchísimo que ver con el golpe de Estado de 1973 en Chile, entre otras tantas cosas que podríamos recordar”. También recordó que cuando comenzaban a multiplicarse denuncias internacionales contra la dictadura instaurada en Argentina en 1976, “recomendó a Videla que hicieran rápido lo que estaban haciendo”, esto es, la aplicación del plan sistemático de exterminio que se estaba perpetrando.
“Y fue uno de los más importantes sostenes de las dictaduras de la Doctrina de la Seguridad Nacional en Nuestramética, tuvo muchísimo que ver en la Operación Cóndor y fue clave en todas las organizaciones del Imperio en el sueño que tenían de que toda nuestra región fuera para ellos” insistió la autora del libro “Operación Condor, pacto criminal”, tras lo que hizo hincapié en que “para su expansión imperial, EE.UU. precisa de personas como Kissinger”.