Los comunistas estadounidenses se organizan y fijan postura respecto a la masacre que se sigue perpetrando en la Franja de Gaza.
No debe ser nada fácil ser comunista en EE.UU., pero pese a esto los camaradas del Partido Comunista de Estados Unidos, avanzan hacia su 32 convención nacional que va a tener lugar del 7 al 9 de junio en la Universidad Roosevelt en Chicago, en el estado de Illinois, que tal como lo destaca la dirección partidaria, “llega en un momento crítico para nuestro movimiento a nivel nacional e internacional”.
En este sentido recalca que dentro del territorio estadounidense, “nos enfrentamos a una amenaza fascista cada vez mayor”, mientras que en el resto del planeta “el imperialismo liderado por Estados Unidos desata su política de agresión particularmente en Medio Oriente, Europa del Este, América Latina y Asia Oriental”, por lo que “seguimos decididamente en la misión de organizar a la clase trabajadora en EE.UU. y fomentar las relaciones internacionalistas en el exterior, con el fin de construir un amplio frente de paz para resistir al imperialismo y ayudar a luchar por el socialismo”.
Fue en este contexto que el PC estadounidense hizo público su repudio al veto con el que, el martes pasado en el Consejo de Seguridad de la ONU, Washington hizo fracasar una resolución respaldada por el mundo árabe, que exigía un cese de fuego inmediato el conflicto desatado por la invasión israelí a la Franja de Gaza.
Por lo que condenó la decisión del gobierno encabezado por Joseph Biden, así como “su continuo apoyo a la guerra genocida en curso contra el pueblo palestino de Gaza” y advirtió que “los pueblos del mundo han despertado ante los crímenes del imperialismo y el apartheid”. Por eso, remarcó, es que “vemos movimientos masivos de clase trabajadora y gente amante de la paz, saliendo a las calles para exigir el fin de la horrible violencia y en apoyo de los derechos palestinos a la autodeterminación”.
Asimismo, lamentó que pese a esto, la Administración Biden, “opta por recurrir a excusas en un intento por proteger su verdadera intención de continuar con su apoyo incuestionable al régimen israelí y la matanza en Gaza” que, recordó el PC estadounidense, ya dejó un saldo provisorio de más de treinta mil gazatíes asesinados que “en su mayoría son civiles, incluidos más de diez mil niños”, en tanto que la infraestructura civil fue arrasada, más de un millón de personas debieron desplazarse en el intento por salvar sus vidas y en toda la Franja hay una terrible situación de escasez de elementos básicos para la vida humana.